El método japonés Kaizen o regla del minuto consiste en realizar cada día a la misma hora una tarea o un nuevo hábito que se quiera adquirir y que cueste trabajo incorporarlo. Sesenta segundos es el tiempo mínimo que se necesita para establecer un hábito. De esta forma, al repetir a diario la misma actividad durante un minuto, se irán acostumbrando.
En tres semanas esa actividad ya formará parte de su rutina cotidiana sin que se hayan dado cuenta y se podrá ampliar el plazo de tiempo: dos minutos, tres o cinco hasta completar la actividad.
Para que el método funcione es aconsejable elogiarles una vez acaben la tarea propuesta, así irán ganando confianza.
Este método se puede aplicar para instaurar rutinas, para mejorar en su rendimiento escolar, para promover hábitos saludables como el deporte o el hábito de la lectura. La premisa es transmitir que lo importante es avanzar un paso cada día, que comprendan que con esos pequeños avances lograrán grandes resultados.
Un método que ayudará a todos los miembros de la familia: Marcar el objetivo, simplificar la tarea para poder iniciarla en solo un minuto y ser constantes haciéndola todos los días.
¿Iniciamos un nuevo reto? Cuéntanos cual va a ser tu propósito.
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