Tener vínculos afectivos es una necesidad que todas las personas tenemos. Todo ser humano necesita sentirse querido, las primeras y más importantes vivencias afectivas se reciben en la familia y nos acompañan durante toda la vida. Cuando los padres muestran sentimientos y afecto a sus hijos, estos crecen más equilibrados y seguros. Pero si en la niñez descuidamos este aspecto, en el futuro aparecerá la inestabilidad o la inseguridad. Los padres deben garantizar a sus hijos la ternura y la calidez necesarias para crecer sintiéndose queridos. Esto les ayudará a madurar, a sentirse aceptados y seguros.
El desarrollo socio afectivo en la etapa de 0 a 6 años es clave por lo tanto para que nuestros hijos crezcan de una manera saludable. Somos los padres y las personas que cuidan a los niños las principales encargadas de estimular y crear un ambiente cálido y acogedor. De esta manera vamos a favorecer que nuestros hijos desarrollen una autoestima adecuada, se sientan parte de la familia y sean felices.
En el siguiente enlace os dejamos el segundo artículo del “Taller para padres y madres de niños de 0 a 6 años” que trata esta área del desarrollo infantil:
https://drive.google.com/open?id=0B_rcnsdImbpGZlZtYUh1bENONjg
https://drive.google.com/open?id=0B_rcnsdImbpGZlZtYUh1bENONjg